La selección sexual: Una historia de seducción

La selección sexual: Una historia de seducción


En el seno de una misma especie, se pueden observar unas diferencias morfológicas entre machos y hembras. Esas diferencias, llamadas dimorfismo sexual, pueden ser tales que los dos sexos son tomados por dos especies diferentes. En 1758, un famoso naturalista, Linné, clasificó el ánade real macho y la hembra como dos especies distintas. Los primeros naturalistas, unos años más tarde, que observaron esas dos « especies » copular juntos fueron, sin duda, muy sorprendidos.


La hembra, en los tonos grises-morenos, se desvanece entre su medio-ambiente, mientras que el macho con la cabeza de un verde brillante es muy visible. El color de la hembra puede explicarse    perfectamente por la selección natural, proceso que a lo largo del tiempo va a seleccionar los individuos que mejor se adaptan al medio-ambiente que los rodea. Así engalanada, es poco perceptible por los predadores confiriéndole una ventaja sobre unos individuos más colorados. ¿Por qué razón el macho de esta misma especie posee colores vivos ? Esto se explica por la selección sexual.


El ánade real macho (primer plano) y hembra (segundo plano)


La selección sexual, como lo escribió Darwin, depende de las ventajas que algunos individuos tienen sobre otros del mismo sexo y de la misma especie, en relación exclusiva con la reproducción. Es decir en el acceso a los compañeros reproductores. Algunos rasgos morfológicos o de conducta son entonces una baza para seducir un compañero sexual. Esos rasgos se llaman caracteres sexuales secundarios y se someten a la selección sexual, al contrario de los caracteres sexuales primarios que son los órganos genitales y las partes del cuerpo utilizadas en el cuidado de la progenitura como las glándulas mamarias en los mamíferos.


Los caracteres sexuales secundarios son muy diversos: el tamaño, el color, la conducta, algunos atributos tales como la cornamenta en los ciervos, la longitud de las antenas o incluso la morfología de los cercos, pinzas en la parte trasera del abdomen, en algunos insectos.


A: El elefante marino, el macho pesa tres veces el peso de la hembra. B: El ciervo, reconocible con su cornamenta, y la cierva. C: El escarabajo longicornio, el macho tiene antenas que superan ampliamente el tamaño de su cuerpo al contrario de la hembra. D: El pato mandarín, el macho tiene colores muy vivos en comparación con la hembra. F: El pavo real, el macho tiene una cola muy colorida que usa para seducir a la hembra. G: El tijereta, el macho tiene cercos altamente curvados al contrario de la hembra.


Los caracteres sexuales secundarios evolucionaron por presión de selección. De manera general, esta se ejerce por el sexo que invierte más para cada descendiente sobre el otro sexo. El esfuerzo parental de la hembra siendo más grande que el del macho en la mayoría de las especies, los caracteres sexuales secundarios son expresados principalmente en los machos. Cuando el esfuerzo parental es casi igual entre los dos sexos, se trata de selección sexual mutua: cada sexo ejerce una presión de selección sobre el otro.


Existen dos tipos de selección sexual: la selección intrasexual y la selección intersexual.


Estos dos tipos de selección permiten diferenciar el acceso al compañero reproductor por competición entre los individuos del mismo sexo (intrasexual) y el resultando de una elección del sexo ejerciendo una presión de selección sobre el otro sexo (intersexual).


La competición entre los individuos del mismo sexo puede hacerse por enfrentamientos directos violentos como en los cérvidos (https://www.youtube.com/watch?v=FMRO__1YH5o), o ritualizados como en algunas serpientes (https://www.youtube.com/watch?v=UGjwnf0r6-U).


Cuando hay elección por el sexo ejerciendo una presión de selección (la hembra en general), esta puede basar su elección en los beneficios que va a obtener de su compañero (el macho en general). Estos beneficios pueden ser directos e indirectos.


Los beneficios directos son recursos nutritivos, territorios de calidad, una protección o unos cuidados parentales importantes aportados por el segundo compañero.


Los recursos nutritivos proporcionados por el segundo compañero pueden tomar la forma de regalos nupciales. El macho de la Pisaura mirabilis, una pequeña araña, trae un regalo nupcial envuelto en seda conteniendo recursos alimenticios. En cuanto la hembra toma el regalo, el macho puede empezar a aparearse con ella. La hembra puede decidir interromper el apareamiento en cualquier momento. Ha sido demostrado que cuanto más gordo el regalo, más tiempo dura el apareamiento y más grande es el número de huevos fertilizados por el macho. Esto tiende a demostrar que la hembra es sensible al aporte nutritivo proporcionado por el macho.


La pisaura mirabilis macho proporcionando un regalo nupcial de seda.


Gráficos presentando respectivamente la relación entre la duración del apareamiento y el tamaño del regalo nupcial (gráfico de la izquierda) y entre la tasa de fertilización de los huevos y la duración del apareamiento (gráfico de derecha) en la pisaura mirabilis. (STÅLHANDSKE, 2001)


Un territorio de calidad puede significar que los recursos alimenticios sean numerosos, que el riesgo de depredación es menor o también que la temperatura del medio ambiente permite un crecimiento óptimo de los jóvenes, específicamente para los medio-ambientes acuáticos.


Una protección puede ser proporcionada por el segundo compañero. Un individuo que se nutre es poco vigilante a los predadores que pueden rodearle. Tener un compañero que tenga una vigilancia muy desarrollada le permite nutrirse más tiempo. La perdiz gris hembra efectúa justamente una elección sobre este rasgo de conducta.


La perdiz gris macho en postura de vigilancia (crédit : Nicolas Bestel)


La protección proporcionada por el compañero puede también ejercerse en cuanto a los congéneres.  En numerosas especies, las hembras son fervientemente solicitadas por los machos para aparearse. Incluso después de la formación de una pareja estable, este acoso sexual puede perdurar, de allí la necesidad para una hembra de aparearse con un macho socialmente dominante.


Los cuidados parentales que serán proporcionados por el secundo compañero pueden apreciarse por la presencia de algunos rasgos en este último. La intensidad del color encontrado en algunos animales es un carácter sexual secundario reflejando su capacidad para encontrar comida en su medio-ambiente. Los pigmentos que vemos son entonces pigmentos encontrados en los manjares que consumen. Es específicamente el caso del flamenco rosa que saca su color de las gambas.


En los herrerillos azules, también se puede observar este fenómeno con el color amarillo en su pecho. Los machos y las hembras que expresan un intenso color amarillo dan de comer más a menudo a sus polluelos que los otros más apagados.


El herrerillo azul dando de comer a sus polluelos.


Relación entre la proporción (%) de orugas dadas a los polluelos y la intensidad del color amarillo de los padres herrerillos azules. (GARCÍA-NAVAS et al, 2012)


En esta especie, los dos sexos pueden elegir un compañero en función de la calidad de cuidados parentales que proporciona.


Entonces los beneficios directos son variados y agrupan las ventajas inmediatas proporcionadas a los compañeros y la descendencia.


Los beneficios indirectos son los beneficios que van a ser transmitidos genéticamente a la descendencia. El beneficio puede ser simplemente una transmisión de un carácter sexual secundario haciendo el hijo, a la edad adulta, tan atractivo como el padre, sino más. En otros casos, el carácter sexual secundario, además de ser atractivo para el sexo opuesto, proporciona una ventaja inmunitaria. Es el caso específico del color amarillo visto anteriormente en los herrerillos azules que, además de ser buena señal de nutrición del individuo, es también señal de un buen sistema inmunitario.


Estos beneficios indirectos proporcionados a cada descendiente son al origen de la evolución de caracteres sexuales secundarios, la esencia misma de la selección sexual. Varios modelos pueden explicar esta evolución. Se detallarán en un próximo artículo.


 


Fuentes:


1. DAHLGREN J. – 1990, Females choose vigilant males: an experiment with the monogamous grey partridge Perdrix perdrix. Animal Behaviour.


2. DARWIN C. – 1871, The Descent of Man and Selection in Relation to Sex. John Murray, Lond Research.


3. GARCÍA-NAVAS V., FERRER E.S., SANZ J.J 2012 Plumage yellowness predicts foraging ability in the blue tit Cyanistes caeruleus. Biological Journal of the Linnean Society


4. STÅLHANDSKE P. – 2001, Nuptial gift in the spider Pisaura mirabilis maintained by sexual selection. Behavioral Ecology.


5. TRAIL P.W. – 1985, Courtship disruption modifies mate choice in a lek-breeding bird. Science, n° 227, p. 778-780.


6. https://commons.wikimedia.org/wiki/File:Anas_platyrhynchos_male_female_quadrat.jpg?uselang=fr


7. https://www.robertharding.com/watermark.php?type=preview&im=RM/RH/HORIZONTAL/869-1446


8.https://cdn.pixabay.com/photo/2020/08/16/16/26/deer-5493267_960_720.jpg?fbclid=IwAR25R67Q0Kt7OSMHnwvBYUMuS6Cp_7bp6CvlOKvJHLAyrf4BqQ8LCPggBd0


9.https://upload.wikimedia.org/wikipedia/commons/thumb/1/1d/Cerambyx_cerdo_%28couple%29_white_version.png/593px-Cerambyx_cerdo_%28couple%29_white_version.png?fbclid=IwAR1LNM-rS3jN0YRW8KqfcZRpmJFFNNSIBs_d12d7TX1wy5mAAseohzeoUKY


10. https://i.pinimg.com/originals/a5/c6/79/a5c679c15b6e16ff330fde3849f394ba.jpg


11. https://sometimesyouwakeup.typepad.com/.a/6a013486b255bb970c0147e2e3b314970b-pi


12. https://sites.google.com/site/joelmeunierfr/The-european-earwig/IMG_0036.jpg?attredirects=0


13. https://tifaeris.files.wordpress.com/2013/05/pisaure-admirable-212.jpg


14.https://www.leparisien.fr/resizer/S4NhQXaNXj49RLSvzyEP4faPeto=/932x582/arc-anglerfish-eu-central-1-prod-leparisien.s3.amazonaws.com/public/F4YY7IFRHJWD5FI3SBGHBEKFQU.jpg


15. https://oiseau-mesange.fr/wp-content/uploads/2013/01/M%C3%A9sange-bleue-01.jpg



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