Nuestros micro-convivientes
Algunos de ustedes seguramente habrán escuchado hablar del microbioma intestinal que hace referencia a las bacterias y otros microorganismos que pueblan nuestros intestinos y que nos ayudan a distribuir los nutrimentos en nuestro cuerpo. Influyen en nuestro comportamiento y nuestras emociones, pero también pueden ser la causa de enfermedades en caso de deficiencia. Para comprender mejor todo esto en un próximo artículo de biología molecular y celular, es importante entender lo que es el microbioma y lo que representa.
Se encuentra en el término de « microbioma », diferente de microbiota, el término bioma. Un bioma, para los científicos, representa un ecosistema compuestos de fauna y flora. En cuanto a « micro », indica que es invisible a simple vista para un ser humano. Se encuentra, en el sentido amplio, virus, bacterias, hongos : cada uno tiene un rol en la estabilidad del medio ambiente. Todos los seres vivos, plantas, animales o nosotros mismos, poseemos nuestro propio y único microbioma, como el medio ambiente, la tierra y las aguas (océanos, ríos, lagos…).
Cuando evocamos el microbioma, hablamos de microorganismos, de sus genes y de las condiciones medioambientales. Todos no son beneficiosos o comensales (viviendo en el seno de un organismo sin perjudicarlo). Algunas especies de bacterias son, en cuanto a ellas, beneficiosas y aseguran unas funciones vitales.
El ser humano agrupa diferentes zonas principales de microbioma con su especificidad : la piel, la boca, la vagina, y el aparato digestivo, que es él mas colonizado. Alojamos más de 100 millardos de microorganismos de más de 1000 especies diferentes, o sea un peso de 1 a 5 kilogramos unicamente al nivel del intestino.
Se constatan unas diferencias entre los microbiomas de cada persona, incluso si esas mismas están en buen estado de salud. Esas diferencias son los resultados de combinaciones complejos de factores genéticos del individuo, pero también del medio ambiente donde se encuentra la bacteria y del modo de vida del individuo afectado. Las diferencias más sutiles pueden tener graves consecuencias como el desarrollo de enfermedades tales como el diabetes. Incluso si no existe microbioma dicho « sano», existe numerosas posibilidades para que nuestro modo de vida interfiere con las bacterias que lo compone. La diversidad de nuestro microbioma es importante. Su multiplicidad nos permite paliar diversos problemas de salud como alergias.
El microbioma cutáneo se adquiere al nacer, durante el paso del bebé por el cuello uterino. El recurso a la cesárea puede entonces provocar en el recién nacido una falta de bacterias para la constitución de su propio microbioma. Con el tiempo, el microbioma va a cambiar y a adaptarse al medio ambiente y a las condiciones de vida. El cambio microbiano mayor cutáneo se produce durante la pubertad, lo que genera a menudo problemas en la piel de tipo acné. Los microorganismos presentes en nuestra piel cumplen varias funciones : nos protegen del ataque de otros microorganismos que no nos pertenecen, infecciones de todo tipo y rayos UV que pueden provenir del sol.
El estudio del microbioma humano no solo se interesa al ámbito cutáneo. Unos investigadores se interesan también a los pulmones que tienen como tipo de enfermedad, específicamente el asma. Hoy en día, los datos obtenidos tienden a demostrar, que haya predisposición o no, que cuanto más se diversifica el tipo de bacterias en el medio ambiente (microbiota), menor es el riesgo de desarrollar un asma importante. La otra enfermedad pulmonar muy estudiada en relación con el microbioma es la fibrosis quística. Es una enfermedad genética potencialmente grave que pertenece a las mas comunes en Francia y en los países occidentales. Afecta las funciones digestivas y respiratorias. Con esta enfermedad, la esperanza de vida es altamente reducida.
Como dicho anteriormente, el microbioma el más poblado de nuestro cuerpo es el aparato digestivo. También se le dice nuestro segunda cerebro (este tema será desarrollado próximamente). El microbioma intestinal tiene un papel en la saluda humana e influye en el desarrollo de enfermedades tales como trastornos intestinales o canceres. Las costumbres alimenticias así como los factores exteriores tiene un fuerte impacto sobre nuestra salud. Numerosos componentes farmacéuticos pueden ser metabolizados por el microbioma intestinal a causa de la fuerte absorción de moléculas en esta zona. Unos estudios de esta zona podrían así permitir de desarrollar tratamientos personalizados con el fin de reducir los efectos secundarios en los pacientes. Para eso, un estudio en la interacción de las bacterias entre ellas, pero también de las bacterias células y de la expresión de sus genes, es primordial.
Es gracias al aumento de análisis de plataforma de ADN, ARN y de proteínas (véase el articulo La proteína, esta estrella desconocida) que el estudio de genes de microorganismos se ha ampliado. Gracias a esas tecnologías, es posible describir su estructura, sus funciones pero también sus comunidades enteras. Con la baja del coste de la secuenciación, los científicos han podido estudiar otros organismos que los que cultivaban hasta entonces en sus laboratorios. Es posible ahora tomar muestras y directamente secuenciar los genes. Se pueden entonces identificar rápidamente unas sepas bacterianas y unas variaciones en sus genes. Para este tipo de manipulación, es sin embargo importante apuntar que es preferible secuenciar el ARN que el ADN. Este método permite observar mejor las modificaciones de la expresiones de los genes que puede revelar una variación genética en el seno de especies de bacterias estudiadas.
« Un bonito microbio puede hacer unas cosas que no son sanas »
No obstante todo no gira entorno a esta técnica de análisis que es la secuenciación. Otros equipos utilizan unas técnicas metabólicas del microbioma. Se trata de análisis químicas que permiten estudiar la comunicación de bacterias entre ellas o entre células directamente.
Un proyecto empezado en 2010, el Earth Microbiome Project, tenia como meta efectuar un catalogo mundial de la diversidad microbiana no cultivada en el planeta. El hoy en día la base de datos disponible más importante sobre el sujeto.
Este tipo de estudio permite entonces de comprender mejor como nuestro ecosistema interno prospera, pero también él que nos rodea. En lo que nos concierne, es primordial cuidar de nuestro microbioma sea cual sea, y específicamente él de nuestro tubo digestivo al nutrirlo de manera sana y equilibrada, sino este podría hacérnoslo pagar por ello…
Fuentes :
1. Eisenstein, M. The hunt for a healthy microbiome. Nature 577, S6–S8 (2020).
2. Gilbert, J. A., Jansson, J. K. & Knight, R. The Earth Microbiome project: successes and aspirations. BMC Biol. 12, 69 (2014).
3. Jobin, C. Microbiome - Un nouveau facteur de risque de cancer colorectal ? Med Sci (Paris) 29, 582–585 (2013).
4. Kho, Z. Y. & Lal, S. K. The Human Gut Microbiome - A Potential Controller of Wellness and Disease. Frontiers in Microbiology 9, 1835 (2018).
5. Wang, B., Yao, M., Lv, L., Ling, Z. & Li, L. The Human Microbiota in Health and Disease. Engineering 3, 71–82 (2017).
6. Weissenbach, J. & Sghir, A. Microbiotes et métagénomique. Med Sci (Paris) 32, 937–943 (2016).
7. (PDF) The vocabulary of microbiome research: A proposal. ResearchGate https://www.researchgate.net/publication/280667622_The_vocabulary_of_microbiome_research_A_proposal doi:10.1186/s40168-015-0094-5.
8. Gut Microbiome: Profound Implications for Diet and Disease. https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC6682904/.
9. Le microbiome pulmonaire en 2015 - Une fenêtre ouverte sur les pathologies pulmonaires chroniques | médecine/sciences. https://www.medecinesciences.org/en/articles/medsci/full_html/2015/12/medsci20153111p971/medsci20153111p971.html.
10.Xénobiotiques et microbiome intestinal actif - Des effets insoupçonnés | médecine/sciences. https://www.medecinesciences.org/en/articles/medsci/full_html/2013/10/medsci20132910p846/medsci20132910p846.html.
11.https://atlasbiomed.com/blog/whats-the-difference-between-microbiome-and-microbiota/
12.https://www.bioalternatives.com/en/microbiota-vs-microbiome/
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